Evita meter la pata o la educación del discurso
En su libro El Arte de
la Conversación, Don Gabor da siete sencillos consejos para comunicarse con
tacto, toma nota:
1.- Piensa antes de hablar: esto es
verdaderamente útil para evitar comentarios indiscretos, por supuesto que es
más fácil decirlo que hacerlo, así que respira profundo y antes de hablar
reflexiona en las siguientes preguntas: ¿cómo me sentiría si alguien me dijera
eso a mí?; ¿qué quiero lograr con mis palabras?; ¿qué respuesta me gustaría
escuchar?; ¿cómo se sentirá la otra persona después de mis palabras?; ¿son mis
comentarios hirientes o provechosos?
2.- Discúlpate cuando metas la pata: A
veces evitar un comentario desatinado no es tan fácil y nos damos cuenta justo
al terminar de decir algo hiriente, fuera de lugar o de contexto, si esto te
pasa:
*
Discúlpate inmediatamente
*
Reconoce tu error
*
Evita dar disculpas rebuscadas
*
Recuerda disculparte con un toque de humildad
*
Lleva la conversación a un tema más animado
3.- Conversa, no compitas: No pienses que
en todas las conversaciones debe haber un perdedor y un ganador, es probable
que si intentas ganar a como de lugar, la conversación adquiera un tono
agresivo. Si adoptas un tono menos agresivo y le das a la conversación un tono
menos trascendente tu conversador se sentirá más cómodo para externar su punto
de vista pero también para entender el tuyo.
4.- Elige el momento oportuno para tus
comentarios: Asegúrate de que la personas con quien conversas está dispuesta a
escuchar, observa si es el mejor momento para tratar un tema o si podría haber
uno mejor. De preferencia evita discutir sobre temas complicados cuando:
*Estés
en lugares públicos o en compañía de amigos o compañeros de trabajo
*
En el instante en que la otra persona está llegando a casa o al trabajo
*
Al despertar
*
Cuando tú o la otra persona estén de mal humor
*
Cuando haya distracciones exteriores o poco tiempo
5.- Céntrate en la conducta de la otra
persona: Observa a tu interlocutor: ¿hay algo que lo incomoda?; ¿mira
continuamente el reloj?, ¿hay algo en sus ademanes que te indique que está
molesto o cansado?, si observas estas reacciones, es probable que puedas
modificar tu tono o incluso la conversación para hacer que se sienta más cómodo
6.- Pon al descubierto sentimientos
ocultos: En lugar de reaccionar a la defensiva, es útil tratar de entender los
sentimientos de la otra persona y ponerlos al descubierto, en lugar de decir a
tu papá: “Deja de meterte en lo que no te importa, mejor preocúpate de tus
propias asuntos”, intenta lo siguiente: “Agradezco tu preocupación pero ¿te
inquieta algo más?
7.- Estate atento a las reacciones: La
falta de atención provoca comentarios indiscretos, así que pon mucha atención a
los detalles, acuérdate que son éstos los que hacen que un buen comentario sea
mal interpretado.
Don Gabor.
(1994). El arte de la conversación. Barcelona: Plaza & Janés
Comentarios
Publicar un comentario
Hola. Si te gustó la entrada, no te gustó o tienes una opinión distinta, escribe un comentario y comenzamos una conversación